Relato ganador categorÃa infantil/juvenil (Nazaret Cachón Fernández)
Un cientÃfico podrÃamos describirlo como una persona que se dedica a investigar para descubrir y mejorar lo que conocemos. En los tiempos que corren estarÃa bien investigar cómo salir de la crisis, pero ya que eso se ve relativamente lejos, aprenden a convivir con ella.
En los últimos años han aprendido a ahorrar, ya que la vida no está barata. En lugar de utilizar vasos de precipitados, matraces o probetas de cristal; compraron vasos de plástico de diferentes tamaños en los chinos, si se rompen son más fáciles de reponer. Han vendido los termómetros y las básculas para sacar un dinerillo extra y ahora miden el peso y la temperatura a ojo, como hacÃan nuestras abuelas, que tan malo no serÃa, si seguimos aquÃ. Cambiaron los mecheros de Bunsen, que consumÃan demasiado; por los mecheros de propaganda de los bares, que empezaron a mendigar por cada bar de su ciudad. Al subir el precio de la luz, decidieron trabajar utilizando la electricidad producida por una bicicleta a pedales. Han adelgazado mucho los cientÃficos últimamente. Hacer pruebas con aleaciones en oro o en plata, ¡ya ni pensarlo! Como mucho cobre y estaño. Ya no les quedan tuberÃas en sus casas para reciclarlas. Ahora ya no tienen un ordenador para cada uno con programas especÃficos, sino que compraron uno central y esta petado de programas a tal nivel que no les entra ni el Paint a mayores. ¿Y esto de laboratorios enormes llenos de aparatos electrónicos modernos y súper caros? Nada, alquilan un viejo garaje a lo más puro estilo grupo adolescente en sus comienzos artÃsticos. Han llegado al punto de que por ahorrar en el sistema periódico de elementos, hayan pasado a tener solo una letra con un número para cada elemento para ahorrar letras.
En resumen, poseen trucos muy buenos para ahorrar pero no tan buenos para el futuro de la ciencia. A este paso en vez de hacer tesis o estudios sobre planetas, enfermedades, reacciones quÃmicas, o temas que interesen a una sociedad o una sanidad humana, solo sabrán hablar de cómo ahorrar para salir adelante, que me parece que con todo lo demostrado anteriormente queda más que claro que; ser cientÃfico en tiempo de crisis, no es nada fácil.